El Señor, lleno de sabiduría, me deja a ciegas. Él apenas si deja que por una rendija se cuele un haz lastimoso, necesario para salir de esa oscuridad. (ver artículo)
El Señor, lleno de sabiduría, me deja a ciegas. Él apenas si deja que por una rendija se cuele un haz lastimoso, necesario para salir de esa oscuridad.
La Iglesia celebra el nacimiento de Juan (24 de junio) como algo sagrado y él es el único de los santos cuyo nacimiento se festeja.
Siguió al Señor Jesús desde el bautismo de Juan hasta el día en que Cristo subió a los cielos y, por esta razón fue puesto por los apóstoles en el lugar que había ocupado Judas. (ver artículo)
El ángel del Señor anunció a María: Concebirás y darás a luz un hijo, y se llamará Hijo del Altísimo. María contestó: He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra. (ver artículo)
Si quieres buscarme conocerme y seguirme invoca la luz, al Espíritu Santo que iluminó a mis discípulos y que ilumina a todos los pueblos que lo invocan. (ver artículo)
Pentecostés es la gran fiesta del Espiritu Santo, porque marca el nacimiento de la Iglesia ¡Que hermosa la forma en que Dios se derrama sobre nosotros por le intercesión de Maria! (ver artículo)
¡Felices las almas devotas del Espíritu Santo! Empiezan ya su cielo sobre la tierra, haciéndose acreedoras a gracias escogidas y recibiendo fuerzas especiales.
Ven Espíritu Santo y abunda en mi vida.
Inundame de tus dones, renovandolos cada día.
Ayúdame a perseverar. (ver artículo)
"Quiero que reces diariamente tres Avemarías, conmemorando el Poder recibido del Padre Eterno, la Sabiduría con que me adornó el Hijo y el Amor de que me colmó el Espíritu Santo" (ver artículo)
Señor, vacíame de mi yo, y haz que mi interior sea cálido, para que Tu Espíritu pueda anidar en mi corazón. Ayúdame para que pueda encontrarte a Ti.
¡Porque sólo Tú eres! (ver artículo)