Saulo de Tarso fue un judío formado en el templo de Jerusalén, orgulloso y practicante de su fe, No había conocido a Cristo, pero conocía la raza de sus seguidores (ver artículo)
Saulo, ¿por qué me persigues?

Jesús llevó la intención virtuosa al extremo de jamás haber pecado. Y si bien El es Dios, también fue hombre. Y como tal estuvo sometido a la tentación. Hagamos todo en la vida con una intención virtuosa. (ver artículo)