¡Tenemos la cura y no la compartimos con los demás! Ni siquiera usamos la vacuna en nosotros mismos. Nos estamos muriendo y la tenemos guardada allí, sin que nadie la utilice. (ver artículo)
Meditaciones
Fuerza de gravedad espiritual
La oración y meditación nos deben ayudar a descubrir nuestras virtudes y defectos, nuestras luces y sombras. Luces que debemos poner a trabajar para ascender en nuestra elevación hacia Jesús. (ver artículo)
Perseverar
Señor, hazme fuerte, dame Tu sabiduría para diferenciar lo bueno y lo malo que se presente en mi camino de crecimiento interior.
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El Camino es la meta
Sepamos ver en el llamado de la Madre de Dios la invitación a caminar, para que el camino sea un encuentro con Jesús en nuestro corazón.
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La muerte no es el final
Esta hermosa reflexión de San Agustín, sobre la muerte, nos puede ayudar a reflexión sobre este gran tema que siempre ha preocupado a la humanidad.
La muerte no es nada, sólo he pasado a la
habitación de al lado. Yo soy yo, ustedes
son ustedes. (ver artículo)
El reencuentro
Lo sé, Jesús. Tantas veces me buscaste, me quisiste hablar de nosotros, de esos momentos en que éramos amigos, entrañables amigos.
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La santa duda
El Señor, lleno de sabiduría, me deja a ciegas. Él apenas si deja que por una rendija se cuele un haz lastimoso, necesario para salir de esa oscuridad.
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Valorar lo que tenemos
El Señor se nos manifiesta en lo pequeño, como en aquel atardecer donde mi amiga supo ver a Dios mostrándole cuan Caballero es. Mira a tu alrededor, construye tu vida desde lo que tienes... (ver artículo)
Un acto de heroísmo
Un acto de heroísmo puede más que mil plegarias, es la llama que quema nuestros pecados ante la Mirada de nuestro Adorable Jesús. El se abraza a nosotros y llora de emoción. (ver artículo)
¿Debo rezar por mis difuntos?
Las almas santas tienen ganada la eternidad de ser felices en un estado de permanente unión con Dios. Y también quienes culminan su vida terrenal en el Purgatorio son almas destinadas al Reino. (ver artículo)