Vivimos tiempos en que un líder de una potencia nuclear hace cosas que nadie imaginaba posibles. ¿Cómo puede ocurrir esto? ¿En estos tiempos? Quizás lo obvio está frente a nuestra vista. (ver artículo)
Nuestro corazón esconde miserias, maravillas y secretos que sólo Dios conoce. Qué hermoso es que de nuestra boca salgan cosas hermosas, como signo y reflejo de que en nuestra alma habita Dios. (ver artículo)
Vivimos siendo parte de una generación que ha perdido el rumbo, que está perdida, y que no reacciona. Una generación que no está “recalculando” la ruta para evitar un desastre. (ver artículo)
Debo confesar que quizás allí, en esa cama de hospital, empecé a quererte, a valorarte. En el borde de la muerte o de una vida miserable... (ver artículo)
¿Es la Paciencia algo distinto, importante, en el Corazón de Jesús? Me consoló el pensamiento de que Dios tiene que ser muy paciente para perdonar y aceptar todo olvido y traición. (ver artículo)
Saulo de Tarso fue un judío formado en el templo de Jerusalén, orgulloso y practicante de su fe, No había conocido a Cristo, pero conocía la raza de sus seguidores (ver artículo)
Una niña de once años tuvo un hermoso sueño. Vio que muchas Virgencitas, representando las distintas advocaciones Marianas, cantaban orando con gran devoción. (ver artículo)
Arráncale una sonrisa a Jesús, de ese Rostro que puede iluminar las noches de oscuridad de muchas almas, desesperadas y dolientes. Luz que surgirá de Sus Ojos y consolará los corazones que esperan. (ver artículo)
En este mar apático se nada y se nada, buscando una isla donde aferrarse. Y esas islas aparecen, cuando cruzamos nuestro camino con alguien que ve a Dios en lo cotidiano. (ver artículo)