Cuando creemos que podemos entender todo, comprender todo, es cuando creemos ser como Dios. ¡Querer ser como Dios, qué locura!.(ver artículo)
Cuando creemos que podemos entender todo, comprender todo, es cuando creemos ser como Dios. ¡Querer ser como Dios, qué locura!.
Pocos futbolistas como Vinicius dan tantas gracias a Dios como él: “Siempre tengo que dar gracias a Dios y a mi familia” (ver artículo)
Algunos lo han calificado de loco y excéntrico, mientras que otros tantos hemos quedado impresionados por la valentía y firmeza de su mensaje de fe. (ver artículo)
Nick no tiene manos ni pies, pero su corazón es un incendio de amor que no radica en lo natural, si no en la fe en Cristo y el sentido que el Evangelio y la Cruz dan al dolor. (ver artículo)