San José, consuelo de los desdichados, patrono de los moribundos

Como tú eres tan bondadoso con los pobres pecadores, no mires mi falta de virtud antes bien considera la Gloria de Dios que será (ver artículo)
La Virgen María encargó a San Juan Diego que recogiera en su tilma rosas de Castilla que habían florecido a pesar del invierno para que se las presentara al Arzobispo de México. (ver artículo)