“Me refugié en la tranquilidad de la capilla, y me enamoré de Jesús. Me di cuenta de que Dios me ofrecía lo que siempre había soñado en la vida religiosa" (ver artículo)
Un mercante español se topó con una tormenta y arrojó su carga por la borda. Todo se hundió, excepto una caja, la de la Virgen con el Niño. (ver artículo)
En el edificio de la Iglesia siempre está el amigo esperando, y ese amigo es Dios, nuestro Señor. Y, afortunadamente hay muchas puertas por donde entrar. (ver artículo)
En este momento difícil para la humanidad la Santa Madre Iglesia nos da doce meses más para recomenzar desde Cristo, dejándonos acompañar por María (ver artículo)