Nuestra Señora no está presente en todas las fases del juicio, pero antes de que se pronuncie la sentencia, Ella le suplica a su Hijo, como abogada defensora. (ver artículo)
Tomás, uno del grupo de los doce, a quien llamaban «el Mellizo», no estaba con ellos cuando se les presentó Jesús... Y Jesús le dijo: Trae tu mano y métela en la herida de mi costado (ver artículo)
Te pedimos tus hijitos, nos regales el don de la Fe, una esperanza sin par, verdadera humildad y la perfecta caridad, inspirada en el seno mismo de la Santísima Trinidad... (ver artículo)
El milagro ocurrido en 1428 cuando la intercesión de la Virgen fue fundamental para que un niño volviera de la muerte para recibir el Bautismo. (ver artículo)