La Virgen se hizo ver con su corazón resplandeciente y dorado. El 3 de enero La Virgen dijo: "¡Soy la Madre de Dios, La Reina del Cielo. Reza siempre!" Entrevista a Gilbert Degeimbre, vidente (ver artículo)
La Virgen se hizo ver con su corazón resplandeciente y dorado. El 3 de enero La Virgen dijo: "¡Soy la Madre de Dios, La Reina del Cielo. Reza siempre!"