Creemos que la Bienaventurada María, que permaneció siempre Virgen, fue la Madre del Verbo encarnado, Dios y salvador nuestro. (ver artículo)
Creemos que la Bienaventurada María, que permaneció siempre Virgen, fue la Madre del Verbo encarnado, Dios y salvador nuestro.
Juan Pablo II, después de casi tres siglos de casi silencio en la Iglesia, volvió a recordar hace 13 años, durante la audiencia pública del 3 de Junio de 1998, la importancia del exorcismo. El Papa habló de los deberes del exorcista y en 1999 se (ver artículo)