Lleno de Espíritu Santo y de fe, que formó parte de los primeros creyentes en Jerusalén, predicó el Evangelio en Antioquía e introdujo entre los hermanos a Saulo de Tarso (ver artículo)
¡Oh Amadísimo, Oh Piadosísimo Sagrado Corazón de Jesús!, dame Tu Luz, enciende en mí el ardor del Amor, que eres tú...
Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío. (ver artículo)
Oh Santo Defensor de nuestras
almas, haz que la esperanza y la
caridad de nuestro corazón
puedan brotar, para en ese canto la tierra y el Cielo colmar. (ver artículo)
Consagrándose a la labor de salvar a los jóvenes del maligno, fundó el Oratorio en Roma. Resplandeció por el amor al prójimo, la sencillez evangélica y su espíritu de alegría y servicio. (ver artículo)
La santa de lo imposible. Fue una hija obediente, esposa fiel, esposa maltratada, madre, viuda, religiosa, estigmatizada y santa incorrupta. (ver artículo)